Confesiones (de un sociópata): ¿Hacia dónde vamos?


En el pasado programa de ECL debatimos sobre el futuro de los videojuegos desde la perspectiva de la potencia gráfica. Tema que sin dejar de ser un reduccionismo nos lleva ante un realidad que desde mi perspectiva es bastante triste. No solo porque nos hemos acostumbrado a un mercado en el que los juegos que consumimos cada vez son más planos, sino que nos quieren vender la moto ¿Por qué?

La respuesta no es sencilla y cada uno podría dar una perfectamente válida pero el hecho es que desde hace un tiempo me encuentro comprando joyitas de hace años y no los juegos que con bombo y platillo nos ofrecen las desarrolladoras. Pongamos un ejemplo real, durante este año solo he comprado ocho de los juegos más punteros que han ido apareciendo. Todos sobemos que en los próximos días saldrá una buena remesa de juegos más y de estos solo dos de ellos pasarán por mis manos. Y no me encuentro con grandes problemas materiales, como nos quieren vender la mato las compañías. No, el hecho es que me he cansado de estos grandes nombres y cada vez más me refugio en juegos clásicos, indies o de estudios de menor categoría.

Empiezo a tener la sensación de que cuando acudo a la tienda más cercana, o reviso el catálogo de cualquier distribuidor, cada vez hay menos juegos que merezcan la pena, y es más: por el precio por el que nos los venden. ¿Alguna vez os habéis presentado delante de la cartelera del cine y no habéis sido capaces de aventuraros a ver una película de estreno? Pues yo estoy en ese punto, y no creo que sea el único. Desde hace un tiempo las desarrolladoras están apostando por juegos que son más producciones palomiteras que verdaderas "obras". Son juegos insulsos, carentes de alma... aburridos. Porque un juego tiene que entretener, ante todo, pero tampoco queremos entretenernos siempre igual.

Y así seguirá.
Y es aquí donde creo que la industria se está equivocando, cada vez más nos dan muestras de juegos que son pura y llanamente prestaciones técnicas, envueltas en una envoltorio de diseño y producción de gran presupuesto. No pondré ejemplos, pero si os diré que dentro de unos meses no recordaréis los juegos a los que habéis empleado ese tiempo, y por supuesto no pagaríais lo que valieron viendo lo que habrá. Porque nos estamos asemejando a un mercado más propio de la tecnología de consumo donde los productos ofrecen algunas nuevas prestaciones, mejor rendimiento, pero son prácticamente lo mismo.

De esta manera, me encuentro sorprendido ante las cifras de ventas de ciertos juegos, que una vez jugados, desde mi perspectiva, no han aportado nada más que sus horas empleadas. Unos verdaderos Sálvame digitalizados, donde el jugador no es más que un pelele ante el mando y solo tiene que pulsar de forma cuasi mecánica las teclas para lograr sus objetivos. ¿Dónde está la imaginación? ¿Dónde está la sensación de variedad? ¿En esos supuestos cambios? Mentira. Esta generación ya se ha agotado. Y no me refiero a su potencia técnica, no. Me refiero a lo mismo que bien apuntaba David (Bonoman) en el pasado programa: "una vez que alcanzas el hiperrealismo ¿qué queda?" Es ahí donde está la cuestión.

Yo, con esperanza, apuesto por una oferta de juegos de "calidad", de autor, de arte. Sé que ha de haber mercado para todo, desde la simulación al más puro arcade, pero hay que abrir una nueva vía que ya se empieza a vislumbrar. Una puerta abierta por aquellos que nunca han pintado nada en el sector. Los desarrolladores independientes que con tesón, mimo, y mucho talento están creando joyas que devuelven la esperanza en un mundillo en el que todos es prácticamente lo mismo que hace diez años pero con mejores gráficos. Solo lo tenéis que pensar detenidamente... Una nueva generación se avecina, y espero que no sea como esta, sino que más: ¿de autor? Donde no compremos los juegos por sus prestaciones sino por todo el valor añadido que nos va a dar un desarrollador que haga los cosas de manera diferente al resto, y no a nivel técnico, sino que de diseño jugable. ¿Qué os parece? ¿Cómo lo veis vosotros?

5 comentarios:

Rolandir dijo...

Mola la exposición. Sin ir más lejos yo me encuentro así, o más bien comencé a encontrarme así con Xbox/Ps3/Cube y de hecho, el salto de generación no me terminó de aportarme nada salvo algún que otro juego que ganó mi corazoncito.
Decir además que cuando eso ocurrió fue por un diseño artístico muy marcado y diferenciador, un buen guión, desarrollo de personajes complejos y profundo y por cosas por el estilo, y claro, como no podía ser de otra forma por pura jugabilidad.

Para que os hagais una idea, en lo que llevamos de generación me quedaría con Super Mario Galaxy para Wii y Bioshock, pero bueno, para gustos colores.

sokomizer dijo...

Hace un par de días leí unas declaraciones de Guillermo del Toro en las que decía algo así como "Los videojuegos se encuentran todavía en su niñez, pero ya hay verdaderas obras de arte".

Es cierto que está todavía en su niñez, pero con matices. Compando un juego de la actual generación con uno de las consolas de 8 bits (unos 30-40 años) se ve una diferencia de madurez y calidad infinitamente superior que la que ves cuando comparas una película clásica como King Kong (1933) con su remake de 2005 (¡y son más de 70 años!).
A lo que vengo a referirme es que actualmente hemos llegado a un tope de calidad gráfica que permite empezar a pensar en otros objetivos.

Una vez alcanzada una buena calidad gráfica, ésta tendría que ser la base sobre la que cimentar otros aspectos que serán los que tendrán que acabar de definir a los videojuegos como arte: mejores guiones, mejores animaciones... Y centrarse en el factor más importante que creo que acabará por hacer triunfar a los videojuegos: mejores formas de interacción con el usuario. Y no me refiero a Kinect o Moves (¡Dios me libre!) sino a que los desarrolladores consigan que seamos nosotros los que de verdad juguemos a los juegos, y no sean los juegos los que juegan con nosotros.

Gelocatil dijo...

Efectivamente y no
Si queremos que los videojuegos gozen de tanta popularidad y reconocimiento como otros sistemas de entretenimiento (TV, cine, música) es inevitable si o si que el mercado quede recubierto de una capa de productos orientados a "la masa", y esto hace que el medio crezca en popularidad y aceptación del gran público, ¿es esto malo? no lo creo, porque igual que en otros medios, sigue habiendo grandes obras que se pueden degustar, lo que no podemos pretender es que todo lo que salga sean obras maestras, porque no es lo que demanda la mayoria.
Dices Anthorion que en lo que va de año, "solo" has encontrado 8 juegos que te hayan atraido, mas otros 2 que caeran antes de cerrar el año; 10 juegos anuales de gran calidad me parece un número increiblemente bueno y creo que demuestra que no hay que preocuparse del mercado, solo saber elegir.

Por otro lado, tampoco veo el problema de tener que elegir titulos de años anteriores para disfrutar de ellos; siempre he defendido el retrogaming, es mas barato, tanto por el juego en si como por los menores requerimientos de hardware, a su vez el juego esta mas pulido y completo, puesto que tendras todos los parches y dlcs incluidos, y sobre todo y mas importante, huyendo de las novedades dejas que el tiempo haga de filtro, para poder distinguir mejor aquellos juegos buenos y complejos que poca gente supo ver en su momento, de aquellos juegos mediocres que en el momento de su estreno se vieron potenciados por el hype y la propaganda disfrazada de prensa respetable.

Planescape Torment! algún dia me atreveré contigo!

Anónimo dijo...

Para que un juego sea de calidad no tiene porque ser un juego indie, de autor o para grupos reducidos.

En estos meses están saliendo Skyrim, Uncharted 3, Zelda, Mario Land 3D... juegos que atraen a las masas pero que además atesoran una calidad altísima y que llevan muchísimo trabajo a sus espaldas.
Son juegos que van mucho más allá de lo técnico.

Otra cosa es que os saturéis porque ahora en vez de hablar de esos juegos con nuestros colegas los vemos en publicidad, en todas las revistas, en anuncios en la televisión y hasta en algún noticiero.
Y que debido a esa saturación, al cansancio de oir hablar tanto de un juego te apetezca algo distinto, diferente y un poco más fresco.

Pero desde mi punto de vista los videojuegos están viviendo ahora particularmente uno de sus mejores momentos.

Anthorion dijo...

@Gelocatil, que me haya comprado 10 no implica que sean grandes juegos, al menos por el precio que los pagué todos no. Y si me preocupo por el mercado cuando leo a gente como (anónimo) que dice que Skyrim, Mario y Zelda son grandes juegos. Lo serán en su presupuesto y en que divierte, pero para mí no aportan nada más, solo chapa y pintura y alguna prestación que sus versiones anteriores (Y no, no van más allá, versionan formulas anteriores, no las cambian). Algo "nuevo" no se ve en el mercado AAA salvo contadas excepciones, y eso es lo preocupante.

Y claro que el retrogaming es una gran solución, en este mismo medio lo he defendido varias veces. Porque como dice Gelocatil, el mejor filtro es el tiempo.

P.D: poneros nicks, que anónimos hay muchos y gente que se anime a opinar poca.

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