Ver para creer, y si no que se lo digan a los pobres diablos dependientes de una tienda de Gamestop que fueron obligados, a punta de pistola, a facilitar el acceso al almacén donde se encontraban las copias del nuevo Call of Duty.
Ha tenido lugar en un centro comercial de Bel Air, situado a unos 48 km al noroeste de Baltimore. Los "cacos" esperaron a la hora de cierre para entrar en la ya citada tienda y llevarse "por la cara" casi 100 copias de Black Ops, cuyo lanzamiento oficial tendrá lugar mañana 9 de noviembre.
La policía investiga ahora los principales puntos de venta de segunda mano para, al menos, intentar dar con los responsables. Guardad bien vuestras copias de Black Ops, la gente podría llegar a matar por ellas.
Fuente: Vandal
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